miércoles, 12 de mayo de 2010

EL DESAFIO DEL BICENTENARIO

Revivir la avenida costanera coronel Dorrego. Crear un polo y corredor turístico, comercial e inmobiliario conservando conciencia ecológica.

En Mercedes tenemos suerte de poseer una espectacular avenida costanera y mala suerte en no poder disfrutar su belleza natural ni su tranquilidad y cercanía. Algo que parece de locos en un mundo que busca disfrutar estas cosas, que se cansa de lo artificial y vuelve a lo natural.

La estratégica avenida costanera sigue al río Lujan varios kilómetros y transita diferentes puntos históricos, turísticos, culturales de gran atracción como el puente del cañón, la palangana, el tiro federal, la pulpería de Cacho, el parque Municipal, la cruz de palo, las ruinas del viejo puente, etc).

Hoy esta casi en abandono a pesar de su potencial interés turístico.

Por ello, en homenaje a nuestros antepasados y futuras generaciones, estaría bueno en este Bicentenario mejorar y aprovechar ese antiguo e histórico camino para bienestar de toda la comunidad. Allí se puede generar un corredor turístico que incluya los puntos históricos mencionados, especialmente concentrados desde el puente colorado del ferrocarril (vía de la trocha) ubicado en el parque Municipal Independencia hasta la calle 26 donde se emplaza la cruz de palo, porque esto reorganizaría el transito del circuito turístico tradicional y en vez de regresar por Av. 29 los fines de semana, la gente que pasea por el parque podría regresar por la Av. costanera Dorrego hasta el centro por la calle 26.

Desde aquí alentamos diferentes actividades para el aprovechamiento de este espacio público, invitando a realizar un plan integral de forestación que incluya especies nativas y asumir el compromiso de cuidar un espacio verde natural ubicado a solo (20) veinte cuadras de la plaza San Martín.

A lo mejor podría ofrecer el Municipio en alquiler diferentes espacios verdes a comerciantes para dar desarrollo a las actividades gastronómicas, deportivas o de esparcimiento, o a los puestos de feria, o hacer una pequeña reserva natural ribereña que pueda visitarse y disfrutarse, y/o cualquier otra acción directa que ayude a conservar este paisaje, hoy, librado a las buenas o malas acciones de los ciudadanos y otros particulares

En definitiva, muchas cosas pueden hacerse por la avenida costanera Dorrego y así generar trabajo, más turismo y revalorización inmobiliaria de esta zona para conformar barrios o comunidades, fundamentalmente determinados por una visión en conformidad con la mejor planificación urbana posible de este lugar histórico y hermoso de la ciudad de Mercedes, lo que sin dudas, seria un logro político, histórico, económico y social digno de recordar hasta el festejo del próximo bicentenario.

lunes, 10 de mayo de 2010

Fomentemos el uso racional del río Luján


El río Luján recorre el norte de la provincia de Buenos Aires ya que nace de la unión de los arroyos de El Durazno y de Los Leones, en el partido de Suipacha, cruzando los partidos de Mercedes, Luján, Pilar, Exaltación de la Cruz, Escobar, Campana, Tigre y San Fernando hasta desembocar en el Río de la Plata a 128 kilómetros de sus nacientes. Cuenta con una variada y rica historia pues debe su nombre a un hecho histórico: en sus márgenes murió el Capitán Pedro de Luján al enfrentarse con los habitantes originarios de estas pampas. Con el tiempo, se comenzó a reconocer al curso como río de Luján. Otro hecho importantísimo fue el milagro de Nuestra Señora de Luján, que en sus riberas decidió quedarse para siempre, al tiempo de realizar "El milagro de la Carreta". Por esta razón, se conformó un pequeño poblado, la Villa de Nuestra Señora de Luján, también a orillas del río. Esta población, tomó importancia, tanta, que para evitar malones de indígenas, se creó el "Fuerte de Luján", que a su vez, y sin intención, formó la actual ciudad de Mercedes. El río fue conservado miles de años por la fauna de la región y los pobladores nativos más antiguos que aprovecharon sus aguas. Pero los últimos años con el avance de la actividad industrial y el crecimiento social desplanificado se puso en jaque su propio ecosistema.
Sin dudas, la cuestión de la conservación y el saneamiento del río Lujan como medida para recuperar nuestro recurso natural más importante, es uno de los pilares centrales en la agenda del progreso social, político y judicial de nuestra ciudad. Marca ineludible de un proceso que deberemos transitar como comunidad organizada para asimilar los efectos de la transformarción llamada conurbanización. Desde hace tiempo, los medios de comunicación son un fiel reflejo de la problemática vinculada al río. La oposición y el oficialismo enfrentan permanentes cruces por el tema y por fuera del aparato estatal, se han desarrollado grupos de vecinos en asociaciones no gubernamentales que impulsan diversos proyectos interesantísimos para poder ayudar o intentar solucionar el problema de la contaminación que produce el fenómeno en la urbe.
Si la parálisis estatal se debe a una cuestión presupuestaria, debería trabajarse en acciones graduales y menos ambiciosas que permitan iniciar un plan de acción y mostrar algo en concreto, tangible. En imposible sostener en el tiempo la razón presupuestaria para zafar de tratar el problema, pues ello, indefectiblemente en los próximos treinta años sería como hacer una apología de exclusión social. Lo ideal, es a veces, enemigo de lo bueno.
No podemos seguir sumando factores intensos como el enfrentamiento de los medios de comunicación, del poder político, del poder judicial, o las organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, las victimas y damnificados, los posibles responsables. Entonces, en semejante desorden de razones y contra razones el tiempo pasa, y las cosas, seguramente empeoran. El Municipio tiene una emergencia ambiental producto de una crisis del crecimiento impulsado por fuerzas externas y la rotura del paradigma que reguló el sistema social durante los últimos 25 años. Pero el cambio de timón y conducción ejecutiva del gobierno debe ser inminentemente programado para su puesta en marcha lo antes posible.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Una ciudad saludable

La ciudad de Mercedes, por sus características urbanas permite desarrollar diversas actividades físicas en los espacios verdes y saludables. Hemos visto que en los últimos años se multiplico la cantidad de personas que salen a caminar, correr o pasear por diferentes espacios. Es muy buen hábito y desde el "Bicentenario" lo alentamos…
Al respecto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) pronostica que prácticamente todo el crecimiento demográfico durante los próximos 30 años tendrá lugar en zonas urbanas. Por ese motivo, ve también a la tendencia (que no tiene visos de desaparecer) como un reto para la salud pública.
La sobrepoblación conglomerada influye en las temáticas del agua y el medio ambiente. También, en un marco de hacinamiento, aumentan las situaciones de violencia y los traumatismos, las enfermedades no transmisibles y sus factores de riesgo como el uso de tabaco, una alimentación poco saludable, la inactividad física, el uso nocivo del alcohol y los riesgos asociados a los brotes de enfermedades.
Según la OMS, las grandes ciudades representan un reto porque la situación de los pobres que viven en ella es precaria: además de estar mas expuestos a episodios violentos, los desamparados "padecen de manera desproporcionada una alta gama de enfermedades".
A su vez, los principales determinantes sociales de la salud en el contexto urbano van más allá de lo estrictamente sanitario, abarcan cuestiones de infraestructura, el acceso de servicios sociales y sanitarios, la distribución de ingresos y las oportunidades en materia de educación.

Las soluciones que propone la agencia de las Naciones Unidas para hacer frente a los principales problemas sanitarios de las ciudades se hallarían en la planificación urbana, desde donde se pueden promover hábitos saludables, como diseñar zonas dedicadas a la actividad física o aprobar reglamentos contra el tabaco.
Para la OMS; el agua y el saneamiento tendrán un efecto relevante en la mitigación de los riesgos sanitarios. También serán significativas las mejoras en las condiciones de vivienda, para lograr el objetivo de una ciudad integradora.